A Cádiz vine a robarle un día...

A Cádiz vine a robarle un día...
A Cádiz vine a robarle un día... y ella fue quien me robó, La Vida... La Vida... La Vida...

jueves, 7 de marzo de 2013

En su voz...

En su voz, el calor de la Caleta. En su calor, el saber que ese es el camino. En el camino, muchos amigos y conocidos. En los amigos y conocidos, las coplas de cada febrero. Y en febrero, todos los febreros míos...

En su voz, el color de la Mar de Cái. Y en esa Mar, mi cuerpo bañado al sol y tostado por la arena fina de tu playa, mientras me reflejo en unos ojos inmensos y repletos a punto de rebosar una paz azul turquesa, que cambian de tonalidad con cada caricia, con cada abrazo, con cada beso...

En su voz, todo el poder de mis sentidos. Toda mi afición y todas mis ganas. Las de siempre y las que aun me quedan por sacar y disfrutar. Las de antes, y las de ahora... y las que tienen que llegar...

En su voz, todo el sentir de una vida como aficionado, que se puede convertir en algo más que escuchar coplas, y escribir sobre ellas. Sobre ellas y sobre las que las cantan. Sobre los que las crean. Sobre quienes les dan vida, y hacen que febrero dure todo un año. Siempre fue así, y no tuve que esperar truco alguno para eso...

En su voz, mi felicidad. Mucha. Toda. Amplia y que se embarca en la comisura de mis labios, dejándome esta noche un sabor a sal y escollera, que me estremece el alma... desde dentro, hacía afuera. Desde mi morada bandera, hasta la misma Torre de la Vela. Estremece y satisface a partes iguales...

En su voz, un pechizco hondo y profundo, que se ancla en mi pecho y que me dice, que algo estaré haciendo medianamente bien...

En su voz, mi deseo, mi alma, mi vida, y mi sangre... En su voz, la mía, de fondo... susurrando que esto es pá chillar. Que lo haces muy bonito, como bonito eres tú. Que voy a decir, si soy tu padre???... 

En su voz, muchas voces de grandes de esta fiesta... desde el Brujo de mi tocayo Paco Alba, pasando por Martín, Villegas, Pedro Romero, Quiñones, Ares, Tino, Bienvenido, Aragón,... todas cantadas cien veces impares, hasta romper nuestras gargantas majaras con un nuevo amanecer...

Y en mis palabras, la mía. Mi voz rota por este regalo. Porque para mi es eso. Un regalo. Escucharte (no lo había hecho antes de estas maneras, aunque siempre te escuché canturrear todo lo que llevo poniendo por casa años y años) me ha devuelto esta noche a un mundo que jamás termino de dejar de lado, por que ni quiero, ni me apetece...

Mi pasión por Cádiz, es mía, como mías son sus coplas, su fiesta, sus gentes, su sol, su Mar (esa es otra que me da y me quita la vida), su amor, su playa, sus barrios, sus calles, sus cosas... las cosas de Cádiz... que ahora ya son suyas, por derecho propio...

Así que solamente te puedo decir, Gracias... Muchas Gracias, nene. Gracias Fran. Gracias, hijo... ya fuiste, eres y serás para mi un regalo... pero este pequeño presente que me has pasado a mi móvil, sin apenas pronunciar palabra, como el que no quiere la cosa (ahí lo llevas, papá)... lo guardaré como lo que es, y como lo que tu eres... un Tesoro...

"Yo no demando tu independencie"... pues no sabría que hacer sin ti... como no sabría que hacer sin tu hermano, sin el Mar que me baña todos los días en sonrisas que me regala la niña de mis ojos a horcajadas, como mis passiones que siempre son tres... como el Carnaval, como Cádiz, o lo mismo que no sabría que hacer ya sin las coplas de mi amigo, Juan Fernández... 

Y si yo soy el tesoro... tu siempre serás parte de él... parte de Yset...