A Cádiz vine a robarle un día...

A Cádiz vine a robarle un día...
A Cádiz vine a robarle un día... y ella fue quien me robó, La Vida... La Vida... La Vida...

lunes, 19 de septiembre de 2011

Y la puerta estaba cerrada

Yo quiero entrar en tu Reino, y la puerta estaba cerrada. Pero para eso están las llaves. Las mías siempre las dejé en otras manos. No me importó eso nunca. Dejadas estuvieron, como dejadas están a día de hoy. Ni siquiera me lo pensé. Las dejé en otras manos y en otras manos seguirán estando. ¿Para que quiero yo unas llaves que no abren más puertas que las que ya logré abrir con mis sonrisas? Os las dejo, todas. Haced con ellas los que os plazca. Que yo no tengo más reino, ni más derechas ni izquierdas que mis propias sombras. Y si me paso la vida cantando, ¿¿¿qué???...

Así que seguiré encogiéndome de alas, aunque siempre con mi sonrisa plena y libre en la comisura de mis labios. Y mi risa será eterna y socarrona. Plagada de quimeras y del regusto que me da el saber quien soy y como he llegado hasta aquí. Y si no entro en tu reino, moriré besándote como siempre, haciendo que mis besos te lleguen como nunca. Seguiré mirando desde arriba las nubes, porque no te pido más que valorar lo que tuve, mientras que estuve contigo. Y aunque alguna vez me sienta desterrado y formando ya parte de tu olvido, no decaeré. No desistiré. Volveré a poner en tus manos todas, toditas las llaves. Una vez más... como siempre fue desde el principio de mis tiempos...

Porque aunque la puerta siga cerrada, yo siempre estaré ahí... y si no me dejas entrar en tu reino, no pasa nada... aquí seguiré, intentado ser útil en este mundo apaleao y condenao, como uno mismo después de tantas y tantas batallas. Así que ya ves, quieras o no... mi redención eres tú, Cádiz... y sin ti no hay paraíso, por muchas sonrisas que dibuje en mis almohadas cansadas de esperar que en ellas deje descansar mi cuerpo  viejo y ajado. Pero, sabes???... "escúchame, Cádiz. Que te lo voy a disí de tú a Tú"... como bien dijo Amaral, sin tí no soy nada. Así que te queda blog pá rato... guapa... que si tu eres el Reino de la Tacita, a mi me sobran las alas tó los días, pa decirte cuanto te quiero...