A Cádiz vine a robarle un día...

A Cádiz vine a robarle un día...
A Cádiz vine a robarle un día... y ella fue quien me robó, La Vida... La Vida... La Vida...

miércoles, 6 de febrero de 2013

A tu casa vendrán...

Seré breve y, a modo de fábula, les contaré una pequeña historia sobre algo que sucedió anoche y que viene sucediendo en Cádiz y en su Carnaval de un tiempo a esta parte.

De esto que a mi casa llega una vecina y me trae una bandeja de los dulces típicos que mi familia lleva haciendo siglos.


 Le sonrío, los pruebo. Algunos están quemados, otros crudos. La mayoría de los pequeños dulces no saben como las delicias ancestrales de mi familia y de mi casa. Pero hay algunos que están buenos, tiernos y de buen sabor. Se lo hago saber: ¡enhorabuena y gracias por honrar a mi familia!

Al momento, conversamos y, en medio de la conversación, le hago saber mi malestar porque en mi familia quieren romper la tradición de hacer una celebración de una forma que a todos nos gusta y nos va bien por otra a imitación de la familia de mi vecina. ¡Qué absurdo, digo!. Ella se ofende, me vocifera y se marcha.


Valga el ejemplo. Viva el Carnaval de Cádiz. Viva la LIBERTAD.